Hackeo emocional
Al hablar de emociones, nuestra realidad responde a nuestra energía, por lo tanto, el cambio está en uno mismo.
Al hablar de emociones, nuestra realidad responde a nuestra energía, por lo tanto, el cambio está en uno mismo.
POR BERENICE RIVERA / PSICÓLOGA EN HTECH
Con toda la intención de brindar información de alto valor para que puedan lograr un bienestar emocional, me di a la tarea de hackear el mundo emocional, poniendo al descubierto algunos de sus secretos mejor guardados.
Frecuentemente oímos hablar de las emociones y de la importancia que tienen en nuestra salud mental. Por ejemplo, a través del cine hemos podido conocerlas de una forma un poco más gráfica, pero estoy segura de que desconocías datos como que sólo tienen una duración de 80 a 120 segundos en nuestro cuerpo.
¿Pero cómo?, si a mí un enojo podría durarme horas enteras, incluso meses. O cuando algo me pone alegre me siento bien todo el día. Lo que sucede es que cuando pasan esos 2 minutos como máximo esas emociones se convierten en ACTITUDES. La palabra actitud se define como la capacidad de sostener una emoción en el tiempo; esto quiere decir que tus pensamientos son los que están produciendo ese estado de ánimo.
Tomando como fundamento el mapa de la conciencia de David Hawkins podemos ver que definitivamente nuestros estados de ánimo tienen un rol protagónico sobre nuestro estado físico de salud.
Hawkins midió en Hertz la frecuencia vibratoria de las emociones y descubrió que las emociones negativas, tales como la vergüenza, la culpa, la apatía, etc., tienen una vibración mucho más baja vs las emociones positivas, tales como la paz, la alegría, el amor, la gratitud, etc., y que entre más bajo vibramos a nivel celular se observa un estado de pre-enfermedad. Por el contrario, cuando más alto vibramos a nivel celular se observa un estado de pre-salud.
Otro dato al descubierto es que las emociones tienen energía electromagnética. Esto quiere decir que funcionamos como imanes, por lo que atraemos a personas y situaciones con energías similares a nosotros.
¿Ahora te hace un poco más de sentido que cuando estamos teniendo un mal día éste se pueda poner peor? O bien, ¿que estemos repitiendo patrones con las personas que nos relacionamos de manera afectiva, por lo que debemos de cambiar nuestra actitud y vibrar en frecuencias diferentes para obtener resultados diferentes?
¿Cómo puedo hacer para cambiar mi frecuencia? A través de la aceptación y la gratitud: ésta segunda tiene que ver con el grado de aprendizaje que puedas adquirir de esas experiencias pasadas, es decir, tenemos que reconocer las ganancias que nos dejan las pérdidas. Por ejemplo, al estar en una relación compleja de codependencia debes comenzar por reconocer y aceptar la situación en la que te encuentras, pedir ayuda para salir de ella y reconocer, a través de la gratitud, los aprendizajes que ésta te dejó.
Si bien, las emociones tienen una relación de causa-efecto ante situaciones, ésta funciona de manera bidireccional: un aumento de sueldo me puede provocar alegría, al igual que sentirme alegre en mi trabajo me puede atraer un aumento de sueldo. Por lo tanto, puedes cambiar el sentido de esa causa-efecto, así que no esperes a sentirte amado para ser feliz, mejor siéntete feliz para atraer ese amor.
Nuestra realidad responde a nuestra energía, por lo tanto, el cambio está en uno mismo.
Pero esta no fue toda la información obtenida en este macro hackeo. Aquí te comparto los mitos más grandes del mundo emocional: