POR GERALDINA LÓPEZ / NUTRIÓLOGA EN HTECH
El sistema inmune es muy importante para el ser humano, ya que nos permite prevenir y luchar contra enfermedades infecciosas. Por eso es de suma importancia saber que su funcionamiento o sus respuestas están influenciadas por algunos factores, tales como:

• Alimentación
• Actividad física
• Horas de sueño
• Peso corporal
• Consumo de tabaco y alcohol

Su impacto en la salud

Tanto una infección microbiana, como el medio ambiente en el que nos desarrollamos, el humo de tabaco, e incluso el estrés, son factores que pueden desencadenar radicales libres. Estas sustancias nos afectan internamente y, si no se eliminan, pueden producir mayor riesgo de enfermedades del corazón, cáncer, arritmias y artritis, al igual que enfermedades del cerebro, respiratorias y autoinmunes.

Debido a esto, es muy importante llevar una alimentación saludable y rica en antioxidantes para poder prevenir o reducir la incidencia de cualquiera de estas enfermedades y tener una mejor calidad vida.

¿Qué papel tienen los antioxidantes en la alimentación?

Los antioxidantes son compuestos naturales que ayudan a retardar la oxidación de las células del cuerpo, contribuyen a producir más células y permiten que se eliminen toxinas. De esta manera evitan que se lleven a cabo algunas reacciones no favorables o perjudiciales en el organismo, a la vez que nos permiten mantener un estado de salud más saludable a lo largo del tiempo.

Por lo tanto, es recomendable el consumo de una alimentación variada, balanceada y colorida, que incluya estos componentes, que se encuentran en vegetales y frutas. Esto nos ayudará al buen funcionamiento de nuestro sistema inmune.

¿Cómo puedo incluirlos en mi alimentación?

A continuación, te compartimos algunos consejos para incluir fuentes de alimentos antioxidantes en tu alimentación diaria:

Acompaña todas tus comidas del día con una porción de verduras.
✔ Consume una pieza de fruta como colación por la mañana y tarde.
✔ Prefiere sazonar tus alimentos con especias y reduce la sal.
✔ Consume frutas y verduras de temporada.
✔ Varía tu alimentación todos los días y consume diferentes opciones de frutas, verduras, cereales y semillas.
✔ Opta por bebidas como café orgánico o té verde.
✔ Evita el consumo en exceso de tabaco y alcohol.
✔ Prepara jugos verdes incluyendo tres verduras de hoja verde, una porción de fruta y complementa con una pizca de perejil, cúrcuma o jengibre.

Para finalizar, es importante recordar que un conjunto de hábitos saludables nos permitirá cuidar de nuestro sistema inmune, por lo que se recomienda realizar al menos 30 minutos de ejercicio al día, mantener un peso corporal adecuado por medio de una alimentación saludable, cuidar y respetar las horas de sueño y evitar lugares con aire muy contaminado.